Generación Beta: los primeros nativos de la inteligencia artificial

18/08, 2025 | Educación, Sociedad

Un nuevo estudio publicado por la Universidad de Santiago ha puesto nombre y rostro a la que será la primera generación de la historia en crecer rodeada de inteligencia artificial: la Generación Beta. Este grupo, integrado por niños nacidos a partir de 2015, no concibe un mundo sin asistentes virtuales, algoritmos de recomendación y plataformas educativas basadas en IA.

El informe señala que la vida cotidiana de estos niños está marcada por la interacción con sistemas inteligentes desde los primeros años. En casa, conviven con altavoces inteligentes que responden a sus preguntas, plataformas de entretenimiento que sugieren películas o canciones según sus gustos y juguetes conectados que aprenden de sus respuestas. En la escuela, ya experimentan con tutores virtuales capaces de adaptar contenidos de aprendizaje a su ritmo, corrigiendo en tiempo real errores de matemáticas o sugiriendo ejercicios adicionales en lectura y comprensión.

De acuerdo con los investigadores, esto representa un cambio radical respecto a generaciones anteriores. La llamada Generación Alfa (2005-2014) fue la primera en convivir con pantallas táctiles y smartphones desde la infancia, pero no experimentó de manera masiva la interacción con inteligencias artificiales capaces de aprender y adaptarse. “Los niños de la Generación Beta no solo usan tecnología: la tecnología los entiende a ellos, los interpreta y se adapta a su comportamiento”, señala el estudio.

Entre los hallazgos más relevantes, el informe destaca:

  • Educación personalizada: Plataformas de IA que diseñan planes de estudio únicos para cada estudiante, acelerando el aprendizaje de quienes avanzan más rápido y brindando apoyo a quienes tienen dificultades.

  • Interacción social digital: Los niños Beta establecen vínculos con chatbots y avatares que funcionan como compañeros de juegos o tutores, lo que abre interrogantes sobre el desarrollo emocional y social.

  • Vida hiperconectada: Hogares inteligentes que anticipan necesidades, desde regular la temperatura de una habitación hasta sugerir recetas para la familia, forman parte del ambiente en el que estos niños crecen.

Sin embargo, el fenómeno también genera preocupaciones. Psicólogos y pedagogos advierten que la exposición temprana y constante a sistemas de IA podría impactar en la autonomía y en la capacidad crítica de las nuevas generaciones. “Si la respuesta siempre la da un asistente inteligente, ¿hasta qué punto los niños aprenden a cuestionar, a investigar por sí mismos o a resolver problemas de manera independiente?”, plantea la psicóloga educativa Ana Ramírez.

Otro de los riesgos señalados es el de la dependencia tecnológica. La Generación Beta podría convertirse en la más dependiente de la historia respecto a la infraestructura digital. Si los sistemas fallan, se bloquean o son manipulados, millones de niños podrían ver alterada su rutina diaria, desde el aprendizaje hasta la comunicación.

Por otra parte, el informe subraya oportunidades únicas: el acceso a educación de calidad sin importar el nivel socioeconómico, la detección temprana de dificultades de aprendizaje y la posibilidad de crear experiencias personalizadas que potencien los talentos individuales. “La IA puede ser una gran niveladora social, siempre que se gestione con criterios éticos y acceso equitativo”, indica el documento.

La Generación Beta también marcará un hito en el mercado laboral futuro. Para 2035, muchos de estos niños estarán dando sus primeros pasos profesionales, en un entorno donde la automatización habrá transformado profundamente el empleo. Las habilidades más valoradas no serán solo técnicas, sino también creativas, críticas y humanas, aquellas que la IA aún no logra replicar.

El estudio concluye con una advertencia clara: la Generación Beta está en el centro de un experimento global sin precedentes. El modo en que gobiernos, escuelas y familias gestionen esta convivencia con la inteligencia artificial determinará si se convierten en una generación más preparada y creativa, o en una demasiado dependiente de los algoritmos.

“Estamos observando el nacimiento de los primeros verdaderos nativos de la inteligencia artificial. La manera en que los acompañemos hoy definirá el mundo del mañana”, resume el informe.

Fuente de referencia: El Boyal Día